La IA llega hasta una galaxia muy, muy lejana
De Star Wars a los modelos generativos: el VFX según Rob Bredow, de Lucasfilm.
Como fan de la ciencia ficción y la fantasía, crecí viendo todo lo que ofrecían sagas como ‘Star Wars’, ‘Terminator’, ‘Jurassic Park’ o ‘Alien’. Sin ser profesional del área, siempre me fascinó el arte detrás de los efectos visuales. ¿Cómo lograban esos artistas convencernos de que lo imposible era real?
Con el tiempo entendí algo clave: el artista de VFX es, ante todo, un maestro del engaño —en el mejor sentido de la palabra. Aunque las herramientas cambien con las décadas, su misión sigue siendo la misma: crear la ilusión perfecta.
Hoy, la inteligencia artificial se presenta como la nueva frontera tecnológica que atraviesa esta disciplina. Y para muchos, también como una amenaza. Pero no todos lo ven así.
Uno de los referentes del sector, Rob Bredow (SVP de Creative Innovation en Lucasfilm), compartió su visión en una reciente charla TED, usando como ejemplo la historia de ILM (Industrial Light & Magic), la legendaria empresa de efectos visuales fundada por George Lucas.
¿Su postura? Sorprendentemente optimista.
ILM: cuando el arte y la ingeniería se cruzan
Para quienes no estén familiarizados con ILM, fue fundada por Lucas hace 50 años con una idea simple y radical: hacer trabajar codo a codo a artistas e ingenieros.
Un ejemplo que marcó un antes y un después fue la apertura de ‘Star Wars: Episodio IV’. Ese famoso plano del Star Destroyer no habría sido posible sin la Dykstraflex, una plataforma de cámara controlada por computadora que permitió, por primera vez, movimientos dinámicos en miniaturas.
Bredow sostiene que la verdadera “salsa mágica” en la innovación de VFX sigue siendo esa fusión entre arte y tecnología. Y, hasta ahora, la historia de ILM a través de sus producciones le da la razón.
Jurassic Park (1993): la extinción del stop-motion… o no tanto
En la producción original, los dinosaurios iban a filmarse con modelos a escala y animación stop-motion. Pero un test de gráficos por computadora —novedoso para la época— lo cambió todo: Kathy Kennedy se lo mostró a Spielberg y el resto es historia.
Phil Tippett, legendario animador contratado para hacer stop motion en la película, confesó sentirse “extinguido” después de ver las pruebas. Pero su trabajo no desapareció: las tomas finales combinaron sus técnicas clásicas con las nuevas herramientas digitales.
Indiana Jones y el Dial del Destino: rejuvenecer con IA
En la apertura de la película, el rostro joven de Harrison Ford fue logrado mediante modelos de IA generativa entrenados con sus actuaciones pasadas (con su consentimiento).
Se combinó esa técnica con una versión completa en CG de su actuación. ¿La razón? La IA aportó semejanza, pero el detalle y el control vinieron de los artistas.
The Mandalorian: virtual production y técnicas de siempre
La serie impulsada por Jon Favreau revolucionó la producción con su uso de pantallas LED gigantes y escenarios virtuales renderizados en tiempo real. En vez de llevar al elenco por el mundo, trajeron los mundos al set.

¿Lo interesante? Nuevamente, la mezcla: naves en CG sobre fondos LED, y hasta robots animados por Phil Tippett en stop-motion. La tecnología más antigua conviviendo con la más reciente.
IA generativa: herramienta, no reemplazo
En su charla, Bredow presentó un cortometraje experimental creado por Landis Fields, en apenas dos semanas y utilizando herramientas de IA. Con este ejercicio, ILM no buscaba una pieza terminada, sino explorar ideas visuales: un mood board en movimiento, desde la perspectiva de un droide que visita un planeta nuevo:
Bredow es claro: la IA puede ser una gran aliada creativa —y una vía sostenible para el negocio— si se usa con criterio. Con datos autorizados, permisos claros y un enfoque centrado en el artista. Las tecnológicas, advierte, no tienen todo el panorama: los narradores visuales necesitan herramientas pensadas para ellos, y desarrolladas junto a ellos.
El futuro: ¿riesgo o expansión?
Bredow recuerda que, cuando surgió el motion control, apenas había unas pocas docenas de especialistas. Hoy, en la era del CGI, hay cientos de miles de artistas trabajando en VFX. Para él, la inteligencia artificial representa una nueva oportunidad: una expansión del campo creativo.
Según el informe Future Unscripted, los estudios de VFX están participando cada vez más desde las etapas iniciales de las producciones, lo que les permite incorporar tecnologías como la IA generativa para potenciar la creatividad y la eficiencia. El 80 % de los primeros adoptantes de esta tecnología ya la utilizan o planean utilizarla en procesos de postproducción, centrados en la edición y la incorporación de efectos visuales para finalizar el contenido.
De hecho, ya hay compañías consolidadas liderando esta transformación. Flawless está a la vanguardia con herramientas que permiten no solo editar rostros, sino también sincronizar labios con doblajes en distintos idiomas. MARZ ofrece Vanity AI, una solución ampliamente utilizada en la industria para realizar retoques faciales precisos cuadro por cuadro. En paralelo, Metaphysic ha ganado notoriedad por su trabajo en ‘Here’, la película de Robert Zemeckis, donde aplicaron técnicas de de-aging sobre Tom Hanks y Robin Wright con un equipo reducido y en tiempo récord.
Pero esta revolución tecnológica también implica una transformación profunda del sector. Roles técnicos clave en la postproducción y los efectos visuales —como modeladores 3D, animadores y editores de sonido— figuran entre los más vulnerables, con un tercio de los líderes de la industria anticipando su posible reemplazo parcial o total en los próximos años, según el mismo informe.
Por eso, para que la visión optimista de Bredow se concrete, no basta con entusiasmo. Será necesaria una reconversión sustancial del rol del artista, acompañada de capacitación y un acceso más democrático y responsable a estas tecnologías.
El pasado no se repite, ¿pero rima?
¿Veremos en alguna futura entrega de ‘Star Wars’ una secuencia tan icónica como la del Star Destroyer de 1977, pero creada con IA?
El entusiasmo de Bredow, respaldado por la historia, se alinea con una famosa frase: “el pasado no se repite, pero rima”. Aun así, el impacto de la IA es incierto. Su capacidad disruptiva podría superar ampliamente a las innovaciones anteriores en el sector.
Y en ese contexto, conviene recordar una máxima del mundo financiero que también aplica aquí —y que quizás Bredow debería tener presente—: “el rendimiento pasado no garantiza resultados futuros”.
Noticias breves
La Oficina de Derecho de Autor de EE.UU. publicó una versión preliminar de un informe acerca del entrenamiento con IA generativa. De acuerdo al abogado José Roberto Herrera Diaz, el informe “analiza en detalle si entrenar modelos de IA con material protegido por copyright podría considerarse “uso justo” (fair use) bajo el derecho estadounidense. Excepción que no aplica en países latinoamericanos y europeos bajo el sistema de derecho continental, pero que puede brindar igualmente ciertos parámetros para la eventual implementación de excepciones legales y compensaciones obligatorias para autores y titulares”.
Spotify actualizó su función de AI DJ para permitir a los usuarios premium cambiar el género o el estado de ánimo de una playlist usando comandos de voz.
SoundCloud aclaró que no usa contenido de artistas para entrenar modelos de IA generativa, tras críticas por un cambio en sus términos de servicio. La empresa aseguró que solo aplica IA para recomendaciones y organización de contenido, no para generar música.
Thierry Frémaux advirtió que la inteligencia artificial se ha vuelto “una herramienta poderosa, interesante y preocupante a la vez, cuyo uso debe ser regulado”. Defendió la necesidad de proteger los derechos de autor y de los actores, y calificó como “aterrador” haber escuchado una grabación generada con su propia voz.
Studio71 lanzó Parcel, un servicio impulsado por IA que ayuda a creadores a adaptar y distribuir contenido en múltiples plataformas como YouTube, TikTok e Instagram. La herramienta optimiza formatos y metadatos, ahorrando tiempo y facilitando el cumplimiento de normas de marca.
Stability AI lanzó Stable Audio Open Small, un modelo de generación de audio estereofónico optimizado para funcionar en smartphones, entrenado con música libre de derechos y enfocado en efectos y riffs breves.
¡Hasta la semana que viene!,
Agustín